LA PATRIA TODO POR ELLA!!

Era una triste y gris mañana. Gris como el alma de los que nos mandan, gris, como el corazón de los que, desde la platea, ladran. Triste y gris como el presente de nuestra Colombia. Era sólo una mañana, sólo un día más, para quienes no llegaron a su destino jamás. Una jornada mediocre y vulgar, en la que nadie podía imaginar, que la muerte se impondría traidora, implacable, cruel, triunfadora. Cuando aún clamaban los gritos de los muertos, comenzaron a tejerse entuertos. Soeces cuchicheos de vieja desdentada, de pécora celestina y alcahueta interesada. Cuando no se había recogido las esparcidas entrañas ya clamaban los voceros sus patrañas. Desesperados por sus trece monedas salvar, otros, iracundos, para poderlas ganar. Gravemente herida nuestra Madre yacía, postrada ante las hienas de mirada vacía, que a la gresca a hermano contra hermano lanzaban mientras otros tanto agonizaban. Sobre el todo triunfó la parte, la gran meretriz sacó su arte, para dividir y emponzoñar y, de su mal, a todos contagiar. Sombríos semblantes, caras derrotadas, banderas patrias abatidas de astas tronchadas, no en batalla ni en refriega, si no por aquellos que la traición niega reciban el título de español, ni de hombre, ni de mujer, sólo ruin y despreciable hez pueden ser. No habrá Justicia sin Victoria, que nos libre de la escoria del tendencioso, del mentiroso y del asesino, descansad mártires nuestros, porque ese será su sino. Os prometemos una mañana diferente, feliz, alegre, soleada y sonriente para América, para Colombia y su gente y así, poder volver a alzar la frente.